Que indignante que La Hora Radio Roma 2 no esté siempre y eternamente en cartelera. Con su comedia ligera pero inteligente y la capacidad de ir cambiando de invitados por función, entre toda la variedad de gente que la industria tiene para ofrecer a la cual meter en problemas, da coraje ver que el 18 de diciembre cierran temporada, cuando lo tiene todo para funcionar por años.
En concepto, La Hora Radio Roma 2 nos lleva al behind the scenes de una estación de radio donde se graban dos radionovelas de la época: La Quedada y Ramaman. Pero a diferencia de una Crimen, Pasión y Boleros, por ejemplo, La Hora Radio Roma no busca un retrato real de la radio mexicana en los 40, pero más bien usa su temática como pretexto para armas sketches a la Les Luthiers (muy en ese estilo de comedia) donde los locutores no solo actúan vocalmente para un micrófono, pero se van transformando en una serie de ridículos personajes para el público en sala.
De modo que La Hora Radio Roma se vuelve una parodia que lo incluye todo: los sonidos creados a partir de objetos variados que en efecto se usaban en tiempos del reinado de la radio, divertidos anuncios de productos levemente racistas de la época, pero también recreaciones con tocados y algo de vestuario de las situaciones descritas en ambas radionovelas, que ya no tienen sentido alguno con el concepto radiofónico, pero que hacen de la obra una locura de carcajada tras carcajada.
Además de contar con la pluma de Jerónimo Best, Camilla Brett y Cristóbal Montiel, la obra está co-dirigida por Brett y Artús Chávez (Pedro Melenas), que lleva su característico clown para transformar a estos locutores en personajes absurdísimos que no pueden sino ser hilarantes. Desde Christopher Aguilasocho como Ramaman que nunca deja de moverse como si tuviera espasmos que lo obligaran a posar, y hasta Ana González Bello como Raymunda, la gran enemiga de la Quedada, que invoca una voz francamente de ultratumba -como si Dory conociera a María Félix- que llena de risas el teatro con cada línea que sale de su boca. No me puedo imaginar a una vis cómica más ideal para este proyecto que el grandísimo Artús.
Entrando a lo que hace único y excepcional cada capítulo (función, pues) de La Hora Radio Roma 2, es que, acompañando a las cinco personas alternantes del elenco fijo, se suma un sexto invitado especial, que no conoce ni ha ensayado la obra, y que es soltado a la jaula de las hienas, para improvisar y acoplarse a todo lo que se le pide al momento, con toda la capacidad de triunfar en grande o fracasar para el goce del público, que de una u otra forma, va a amar su participación en el show. Para ellos debe ser de nervios.
A mí me tocó ver al Guana y no pude haber caído en mejores manos. Gracias a él se vivió una función explosiva donde, Guana, utilizando todas las herramientas de años de dedicarse a la comedia física y de resolver con ingenio personajes e improvisaciones, logró romper varias veces al elenco de la obra, y sacar carcajadas y aplausos -muy merecidos-en butacas, con un manejo impecable de la voz para hacer todo tipo de onomatopeyas, y una corporalidad enérgica que evidencia, sin duda alguna, que es uno de los mejores cómicos de este país.
Ahora, yo sólo puedo hablar por la función que vi, pero este temporada de La Hora Radio Roma 2 ha tenido a otros talentazos como Maru Gaga (Poncho Borbola), Montserrat Marañón, Michelle Rodríguez y Las Mamás Presentan, entre muchos otros, que seguramente le dieron una vitalidad distinta al montaje, y diferentes momentos memorables a los que yo viví con Guana. Y he ahí lo que hace a La Hora Radio Roma 2 tan versátil y eternamente entretenida, puedes verla 100 veces y nunca te va a tocar repetir algo similar.
Más allá del factor improvisación que dota a la obra de absoluta sorpresa y frescura, los sketches tanto de La Quedada como de Ramamán son enormes en su farsa a lo que en una década del entretenimiento en México se consideró magnífico. Desde el hecho de que la Quedada está quedada a sus 36 años y para todo mundo ya no tiene salvación, y hasta la reconocible parodia de Kalimán y su turbante, que en Ramaman se vuelve ridículo cuando lo ves hablar con arañas y presumir los súper poderes más inservibles.
Todo eso delineado por jingles y anuncios publicitarios que no pueden sino regresarte a la nostalgia de un tiempo en el que todo era enormemente naive, y socialmente cuesitonable de tantísimas maneras. Ingenuo y aberrante se combinan para que hoy en día, los 40 sean fuente de bromas interminables, de mucho ingenio, mucha clase y absoluta bobería. Y no hay nada más brillante que comedia que no tenga que acudir a la ridiculización, el álbur barato o la caracterización ofensiva para buscar la risa fácil.
Me arrepiento de que éste sea mi primer encuentro con La Hora Radio Roma, que no es ni remotamente la primera vez que se presenta en cartelera, ni con este único y muy especial elenco. Pero ahora que la probé quiero más y no me puedo imaginar a nadie que tenga el honor de verla que no salga con esa misma sensación. De ahí que repito, reconsideremos, La Hora Radio Roma 2 es un show que nuestra cartelera merece, y al que cualquiera podría regresar infinidad de veces a ver a sus actores favoritos entrarle al juego sin paracaídas. Larga vida a La Hora Radio Roma.
La Hora Radio Roma 2 se presenta viernes, sábados y domingos en el Teatro Helénico.