Estamos a muy poco de que Tick, Tick…Boom! de Lin Manuel-Miranda haga su estreno en Netflix y la crítica ya se soltó con sus opiniones.
Sabemos que se mueren de ganas por ver a Andrew Garfield, Vanessa Hudgens, Robin de Jesus, Alexandra Shipp y, claro, MJ Rodriguez en acción en la adaptación a cine de Tick, Tick…Boom!, el musical autobiográfico de Jonathan Larson (Rent) que llega a Netflix el próximo 19 de Noviembre, dirigido ni más ni menos que por Lin Manuel-Miranda. Pero en lo que esperan a que su pantalla se llene de 1990 en Nueva York, podemos ver qué está diciendo la crítica respecto a Tick, Tick…Boom!
Antes de eso, tenemos que decirlo, y nos encantaría que compartieran con nosotros si tienen la misma sensación, pero después de la muerte de Larson en 1996, Tick, Tick…Boom! fue adaptado por David Auburn para convertirse en un musical de sólo tres personajes. ¿Qué pasará ahora que Netflix lo tiene tan crecido?
Vamos a ver:
THE GUARDIAN
Lin Manuel Miranda nos entrega un explosivo arrebato de adrenalina del mundo del espectáculo, y al mismo tiempo la solemnidad del mundo del espectáculo en este conmovedor tributo al talento de Jonathan Larson.
THE HOLLYWOOD REPORTER
A pesar de la resonancia del material original de Larson, particularmente evidente en todo Rent, a la visión de Miranda para Tick, Tick…Boom! le falta un sentido similar de lo inmediato, como si estuviera percibiendo el musical a través de una nube de nostalgia, buscando convencer a la audiencia de caer en el hechizo creativo en el que claramente él mismo ha caído. No es una táctica del todo convincente, pero para los musicaleros clavados va a resultar irresistible.
Andrew Garfield, que estudió teatro musical para prepararse para el papel, se aferra al personaje de Larson con entusiasmo inspirado, cavando produnfamente en las problemáticas creativas de Jon y sus conflictos emocionales, consistentemente sacando a la luz las recompensas agridulces de su trabajo artístico, demostrando un considerable rango.
INDIEWIRE
Apunta a una película que incluso en sus mejores momentos, parece estar todo el tiempo batallando con su parte teatral. Tal vez es por eso que un trabajo tan apreciado de un querido autor tomó años en llega a la pantalla en primer lugar. Como sea, es un recordatorio de lo bien que funciona Tick, Tick…Boom! con lo más básico: un hombre que tiene algo que decir y un micrófono que lo ayuda a hacerlo.
THE INDEPENDENT
La película de Lin Manuel-Miranda encuentra un grácil balance entre el hecho y la ficción, enmarcando el arte como una forma intensificada de auto-obsesión y lo más mágico e importante en todo el universo.
Andrew Garfield está feliz de seguir el juego de amor narcisista a Broadway. Como Lardon siempre parece como si lo hubieran electrocutado. Con sus ojos bien abiertos, amoroso y presente en el papel, de maneras que continuamente logran jalar a la película del borde de la auto-complaciencia. Le crees por completo que él es Larson y siempre lo ha sido, lo cual es especialmente sorprendente tomanto en cuenta que básicamente no tiene experiencia cantando.
THE TIMES
Una interpretación por parte de Andrew Garfield que no tiene miedo a comprometerse, y una cucharadita de canciones superiores, salvan a este musical, por poquito, de unirse a la lista de montajes chillones como Dear Evan Hansen, Everybody’s Talking About Jamie y The Prom.
VARIETY
A excepción de «Superbia» y la magnífica «Come to Your Senses» la música aquí es pegajosa, pero lejos de ser lo mejor de Larson, y sin embargo, Miranda encuentra la manera de hacer las canciones entretenidas, incluso cuando no lo son. Miranda retaca Tick, Tick…Boom! con tesoros escondidos para los teatreros, mientras trata los eventos que suceden en la película como influencias formativas para la creación de Rent. Cuando el elenco del taller de Jonathan (un ensamble lidereado por Vanessa Hudgens) se unen al unísono, bien que mal podrían estar udicionando para cantar «Seasons of Love», el número más reconocido de Rent.
THE WRAP
Tal vez es porque Lin Manuel-Miranda es abiertamente un disípulo de Larson que el creador de «In The Heights» y «Hamilton» adapta el musical de 1991 a la pantalla de una manera muy afectiva. Pero incluso con la actuación deslumbrante e inmediata de Andrew Garfield al centro de todo, Tick, Tick…Boom! necesita un ojo más crítico -o al menos más consciente- para recrear el tipo de profundidad desaliñada y perspicacia que tenía que haber tenido como respuesta a décadas de un Broadway hinchado y ostentoso.