7 razones definitivas para ver LA CASA DE PAPEL

Sabemos que todos están hablando de La Casa de Papel, esta épica serie española que nos agarró por sorpresa y que se ha convertido en la conversación preferida de todos aquellos que amamos las series principalmente por estas siete razones:

Es posible que seas de ese pequeño grupo que tiene que sonreír de manera ausente cuando sale el tema de Casa de Papel entre sus amigos porqué por alguna extraña razón no la has visto, así que no te preocupes a continuación te dejamos las razones definitivas de por qué tienes que armar un maratón de inmediato.

Y si eres de los que ya la vio, seguramente podrás coincidir con nosotros:

UNA HISTORIA EPICAMENTE ENGANCHANTE

Aunque no es la primera de su tipo, la forma en la que se cuenta le da la singularidad que necesita para generar un gran impacto. Un asalto a la Fábrica Nacional de la Moneda y Timbre, con rehenes incluidos, con un plan maestro detrás y ejecutado de forma casi perfecta, hace que te enganches de principio a fin.

En lo particular amamos cuando el plan de los “chicos malos” es armado a la perfección y amamos aún más cuando hay una salida inteligente para cada callejón.

PERSONAJES QUE DESTILAN ESTILO

Una serie está construida de buenos personajes. En La Casa de Papel tenemos a la cabeza detrás del asalto, ‘El Profesor’ (Álvaro Monte), así como a cada uno de los encargados de ejecutar su plan: Tokio (Úrsula Corberó), Nairobi (Alba Flores), Río (Miguel Herrán), Moscú (Paco Tous), Berlín (Pedro Alonso), Denver (Jaime Menéndez Lorente), Helsinki (Darko Peric) y Oslo (Roberto García). Las peculiaridades y genialidades de cada uno sorprenden.

La química del cast es sublime, aquí tenemos el clásico ejemplo de que aún con actuaciones no tan buenas, el espectador lo pasa por alto al recibir una deliciosa dosis de pasión actoral de la madre tierra.

VUELTAS DE TUERCA DIVERTIDAS

Recomendamos esperar más de un cliché o imaginar el final de cada secuencia de la serie para sorprenderte aún más porque vas a acabar recibiendo todo lo contrario. En La Casa de Papel las cosas nunca suceden como uno presiente. Como es de esperarse los planes comienzan a fallar, confesamos que varias escenas en particular si nos tomaron por sorpresa y deben creernos cuando les decimos que no es fácil que nos pase.

Amamos las vueltas de tuerca españolas.

NARRATIVA BIEN ARMADA, GUIÓN ARTESANAL

Si bien la historia se narra en tiempo presente, los ‘flashbacks’ que explican cómo fue ideada cada parte del plan son sorprendentes y cautivadores. La fórmula está tan bien lograda que estos viajes al pasado a veces terminan siendo indispensables. Tal vez, el único punto prescindible es la voz en off, aunque es cuestión de gustos, a nosotros nos encantó.

SE NOTA EL PRESUPEUSTO BIEN INVERTIDO

Si somos exigentes en temas de fotografía, narrativa, vestuario y producción la serie nos terminará atrapando. El trabajo de los realizadores ha recibido los aplausos de la crítica en distintos países. Algo que no debe sorprendernos de Antena 3, televisora que produce la serie, ya que anteriormente nos ha ofrecido grandes trabajos como “Los Hombres de Paco” y “El internado”.

Dicho sea de paso la musicalización es hermosa y competente, por ahí una canción seguramente se convertirá en el tono de celular de más de uno.

SE VA COMO EL AGUA

Aunque cada capítulo dura una hora, difícilmente vas a voltear a ver tu reloj, ya que cuando menos piensas te habrás comido la serie completa. ¿A poco no el tiempo pasa volando cuando uno se divierte de verdad?

ATMÓSFERA HÍBRIDA, DONDE SE OBTIENE LO MEJOR DE AMBOS MUNDOS

Por ahí algunos pensaron que Casa de Papel era una especie de telenovela y pues sí, podríamos decir que tiene una vena que nos hace recordar producciones españolas más humildes, sin embargo, basta con ver el primer capítulo para dejar atrás esa concepción. Esta es una serie armada de cabo a rabo con cinematografía de película.