Si eres fan de las comedias románticas te tenemos estas cuatro opciones, originales de Netflix, para relajarte y sentirte enamoradx desde el sillón.
Ah…el amor. No todos lo tenemos y cuando lo tenemos no siempre se porta bien. ¿Pero a quién no le gusta sentirse enamorado?
Netflix lo sabe y recientemente ha lanzado varias comedias románticas (en su mayoría en formato más teen que otra cosa) que funcionan perfecto por lo blancas y hasta retro de sus historias y los increíbles descubrimientos de talento que han hecho entre sus elencos. Varias revelaciones del año entre sus adolescentes enamorados.
Estas cuatro las encuentras en la plataforma digital y te las recomendamos para una buena sesión de Netflix and chill…o bueno, Netflix, arrumacos y palomitas si nos queremos ver PG13.
1. To all the boys I loved before
La película que nos presentó a Noah Centineo (el nuevo R-Patz, si le quieren empezar a decir). Lara Jean es una estudiante de preparatoria tímida y cinéfila (ama especialmente las películas de John Hughes, lo cual le viene perfecto tomando en cuenta que la película entera es un pequeño homenaje al cineasta), jamás ha tenido novio y peor aún, tiene un severo crush con el novio de su hermana.
Aunque siempre ha sido soltera, ha tenido cuatro amores en su corta vida, y a cada uno de ellos les ha escrito una carta que jamás entregó. Sólo a manera de catarsis. Pero cuando su hermanita encuentra esas cartas, decide que es momento de que Lara Jean reciba el empujón que tanto necesita y se las hace llegar a sus recipientes; entre ellos, Peter, el recién cortado novio de la mujer más perfecta del highschool que decide hacer un trato con Lara: pretender ser novios para ayudarse mutuamente.
Un cuarteto romántico que te recordará lo mejor de Hughes, Pretty in Pink y Sixteen Candle, que además rompe los esquemas del género otorgándole el protagónico a una actriz de origen vietnamita (Lara Condor) lejos del estándar blanco de belleza gringa. Y te lo estamos diciendo. Vas a amar a Peter.
2. Set It Up
Al más puro estilo de las comedias clásicas de Hugh Grant, Two Weeks Notice o Notting Hill, Set It Up cambia a su galán inglés por Glen Powell, que si viste la primera temporada de Scream Queens ya sabes que tiene un talento especial para la comedia irreverente, pero con esta rom-com también demuestra que puede robarse el papel del galán encantador sin problemas.
Harper (Zoey Dutsch) y Charlie (Powell) trabajan en el mismo edificio, ambos como asistentes de los directores de sus respectivas empresas. Cada jefe a su manera es toda una pesadilla. La de ella, Kirsten (Lucy Liu) tiene un grave problema de workoholiquismo, perfeccionismo y malos modales; el de él, Rick (Taye Diggs) es egocéntrico, mentiroso y un patanazo, y ambos son una tarea de 24 horas que ha dejado a Harper y a Charlie sin vida propia.
El único posible respiro para los dos asistentes es encontrar la manera de juntar a Kirsten y Rick, lograr que se enamoren, y acabar con la soledad en sus vidas que es una de las razones principales por la cual son tan insoportables. Y el plan funciona…al principio, pero lo que Harper y Charlie jamás ven venir es que en el proceso de arrejuntar a otros, los que comienzan a enamorarse son ellos mismos, a pesar de que son polarmente opuestos.
3. Alex Strangelove
La mezcla perfecta entre Love, Simon y Super Bad. Una comedia romántica diversa para una generación en la que las salidas del clóset no son la tragedia griega que solían ser, y para la cual los escritores se pueden centrar en simplemente contar una historia con encanto entre dos hombres, sin tener que forzar el elemento doloroso de la aceptación y tolerancia social.
Alex Truelove (un excelente Daniel Doheny al que seguro veremos en todos lados ahora que Netflix lo ha descubierto y lanzado al mundo) nunca ha sido especialmente bueno para el amor, pero en algún momento de su adolescencia lo encuentra en Claire, su mejor amiga, y parece crear con ella la relación perfecta, sólida como una roca y con un futuro brillante.
La torre de jenga se comienza a tambalear cuando Alex conoce a Elliot, un guapo hipster abiertamente gay que comienza a moverle el tapete y a hacerlo dudar de todo lo que creía seguro. El elenco tiene una química envidiable y cada personaje secundiario, como McLovin en su momento, brilla con estrella propia. De esta película saldrá el brat pack del futuro, se los estamos diciendo.
4. Sierra Burgess is a Loser
Barb’s back! Luego de haberse convertido en fan favorite gracias a Stranger Things, Shannon Purser se estrena en las comedias románticas y no en un papel secundario, pero con el título de estelar. Y demuestra de una vez por todas que, aunque no cabe en el molde de perfección que Hollywood nos ha vendido desde siempre, su talento y carisma son más que suficientes para llenar la pantalla con una historia de amor donde la mujer más inesperada consigue al atleta de sus sueños (y sí, ese atleta es nuevamente Noah Cetineo. Yay!)
Sierra no es la más popular de su escuela, aunque nunca se ha dejado afectar por eso. Conoce su lugar en la cadena alimenticia y no lo sufre, pero cuando la bully oficial del highschool, Veronica, le juega una obra dándole su número a un hombre que se le acerca en una cafetería, haciéndole creer que Sierra es ella, Sierra Burgess se queda atrapada en un catfish del que no puede salir. Por un lado sabe que está engañando a Jamey, del que cada vez está más enamorada -aunque no lo conoce en persona-, pero por otro, decirle la verdad arruinaría por completo sus posibilidades de seguirlo teniendo en su vida.
Al igual que To All The Boys I Loved, a Sierra Burgess is a Loser se le siente la inspiración en John Hughes por todas las esquinas. Es retro, romántica, boba, tierna y rosa, sin un rastro de la exagerada exuberancia que aqueja a las comedias teen hoy en día, sin lo vulgar o escatológico de un Adam Sandlerzazo, y con mucho corazón. Y por si las referencias ochenteras en la trama no fueran suficientes, la película, además, utiliza entre su elenco a Lea Thompson y Alan Ruck, los reyes de las comedias pre-Julia Roberts y Sandra Bullock.
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