Avengers: Infinity War – Review

Aquí estamos, después de 10 años y 18 películas enfocadas en superhéroes por fin tenemos el sueño geek que jamás pensamos ver en pantalla grande: un evento sin precedentes en la historia del cine, donde la visión de un mundo conectado llega a su culmen de la más grandiosa forma posible: Avengers: Infinity War.

Tan solo en México casi MEDIO MILLÓN de personas acudieron a ver el preestreno, construyendo en las salas un fenómeno que desde Titanic no se veía, una atmósfera de abandono y camaradería palpable al descubrir que los comics desde hace un buen rato han dejado de ser un “hobby” para ñoños escondidos en las cobijas. Marvel y Disney superaron el teórico “hartazgo” de los comics y en respuesta construyeron una película sólida… una obra maestra dentro de su propio género.

En esta ocasión la joya de la corona del universo cinemático de Disney vuelve a estar a cargo de los hermanos Anthony y Joe Russo, quienes contraria a toda predicción y después de una muy personal Soldado de Inverno, cimientan su carrera con una gran Civil War, para entonces llegar merecidamente a Avengers: Infinty War, la cual dirigen con extrema precisión, sin caer en  protagonismos excesivos de algunos héroes sobre otros, entregando una película armada perfectamente y con una dinámica deliciosa, donde literal todos reciben tiempo de calidad, y con ello, todos los fans de algún superhéroe en particular obtienen ese momento donde sin lugar a dudas brilla.

La historia básicamente nos deja ver la búsqueda de Thanos (El titan loco) por las famosas gemas del infinito, las cuales en conjunto pueden otorgar poderes omnipresentes. Thanos tienen como meta eliminar a la mitad de la población del universo, no por maldad pura, sino por un deseo genuino de mantener un universo en balance donde menos seres vivos equivalen a mejor calidad de vida.

Durante la película, Thanos y sus hordas pelean en diferentes lugares exóticos, desde NY y Wakanda, hasta los confines del espacio. Los grupos de héroes se manejan divididos a veces en tres, a veces en dos grupos -pero básicamente aparecen casi todos los del MCU- los cuales van superando sus propias aventuras, rotando satélitalmente alrededor de un Thanos que une… o más bien destruye a nuestros queridos héroes.

Debo decir que me hubiera gustado a ver todos juntos en la misma batalla, pero supongo que eso lo veremos hasta la siguiente película -última de la fase 3 de Marvel.

Curiosamente lo más destacable de la película es precisamente su villano, Thanos. La interpretación de Josh Brolin es perfecta, un personaje multidimensional lejos del típico malo de malondia, tanto que así que puedes esperar que una parte de ti entienda su misión y en ocasiones hasta desee -secretamente- que gane. Un malo que además no tiene empacho en llorar y mostrase sensible, no idiotamente sensible sino genuinamente emocional. Aplausos.

Los efectos especiales son literalmente los más caros que se pueden pagar, se nota especialmente cuando gran parte de las batallas suceden en plena luz del día. Los detalles abundan, tantos que una sola pasada a la película no logra capturarlos todos. Tendremos que verla en repetidas ocasiones.

Por otro lado, las coreografías de acción son perfectas, algunos movimientos rápidos pero la mayor parte del tiempo puedes ver perfectamente la acción en pantalla, lo cual se agradece, después de otras películas del género como Transformers, repletas de escenas de acción donde no se entiende nada de lo que está pasando.

Otro punto a favor es que la película se siente diferente, es una gamechanger para el universo MARVEL. Desde el momento inicial de la película no esconde su falta de empacho en eliminar a personajes muy queridos, lo cual genera gran expectativa en los fans, y mantiene a la audiencia al filo del asiento.

Sin mayores spoilers, tenemos que decir que aplaudimos con muchas ganas la decisión de Marvel/Disney de ofrecernos una primera parte de este final a Avengers donde los buenos no la tengan segura. Y no con una cinta que se sienta como una especie de película larga dividida en dos, pero una historia que abre y cierra por sí misma de una manera teatral raramente usada para cintas múltiples de este tipo.

Sin lugar a duda Disney/Marvel ha sido una de las mancuernas más épicas de todos los tiempos, logrando verdaderos récords y milestones cinematográficos, ahora solo nos queda esperar pacientemente la conclusión de Avengers: Infinty War, que desde ahora podemos considerar como la mejor película del MCU.

Corran a verla, los que ya lo hicieron comenten que les pareció